Ahora que Miguel del Fresno (también conocido como @Yo_antitwitter) se haya en plena promoción de su nuevo libro «El Consumidor Social: reputación online y social media«, permitidme que de un par de brazadas contracorriente y os deje cuatro notas acerca de su anterior libro, «Netnografía«. No se trata de la urgencia de postear antes de que Miguel publique un tercer libro (jeje), sino de que la vorágine de la actualidad y la publicación de novedades no nos difumine un trabajo anterior que, en mi opinión, aporta mucho y muy interesante.
«Netnografía» es una propuesta de método de estudio sobre cómo nos comportamos en el entorno digital, hecha desde el campo académico. Dada la innegable certeza de que nuestra imagen en el mundo de los bits va cada vez más enlazada a nuestra imagen en el mundo de los átomos y de que somos la misma persona en ambos entornos, urgen herramientas que nos permitan estudiar cómo esa dualidad bits-átomos evoluciona nuestras relaciones sociales. La Netnografía será a las redes sociales lo que la etnografía al estudio de un grupo social, y espero que Miguel no se ofenda por tan burda reducción.
En sus palabras «la investigación netnográfica es idónea para la investigación de grupos limitados de personas que comparten un objetivo, afinidad o necesidad como eje vertebrador de la confirmación de una comunidad online, que puede tener su nacimiento en el contexto social offline u online«.
Quería en este post, además de recomendaros el libro, mencionar unas cuantas ideas que me han parecido confirmaciones especialmente interesantes, haciendo de nuevo»reduccionismo» y que Del Fresno me perdone:
- Cada comunidad online tiene unas pautas de comportamiento y de comunicación propias y la mejor manera de comprenderlas es ser aceptado en esa comunidad. Esto es lo que muchas agencias que se lanzan a buscar clientes a las redes sociales y a la blogosfera no han comprendido: están en la comunidad pero no forman parte de ella. Del Fresno llama realidad social ampliada al apoyo social que el cibernauta obtiene de esa relación online con quienes aprecia, y me parece un término genial para todos aquellos que se empeñan en que esto de las redes sociales es una moda y una pérdida de tiempo que nos aísla y tal y eso…
- Dinamizar una red social o una comunidad pocas veces es un acto espontáneo, hay que trabajárselo «las comunidades online para ser operativas y alcanzar sus objetivos, sean cuales sean, también necesitan de personas que funcionen como nodos relacionales, facilitadores, moderadores para la negociación, el consenso, la comunidad de intereses, el compromiso, el logro de objetivos«
- En la redes, lo cualitativo de las relaciones pesa más que lo cuantitativo del número de miembros. «la eficacia y el valor de una red social no solo depende del número de miembros totales y del número de enlaces que se mantengan activos en su seno sino también de la intensidad y calidad de las relaciones entre los miembros y de la coherencia y consistencia estratégica y táctica para conseguir un objetivo que sea reconocido, de forma implícita o explícita, como común«.
Seguro que la lectura de Netnografía os aportará más cosas que las pocas que os señalo aquí. En todo casi, si las anotáis usando la aplicación Notas de iphone o ipad cuidado al sincronizar o os incluiré conmigo en el grupo «señores que pierden las notas de los últimos meses actualizando mal» 🙂