Hace pocos días tuvo lugar en Barcelona el acto de entrega de diplomas a los alumnos de la primera promoción del Máster Ejecutivo Semipresencial en Community Management y Dirección de Redes Sociales en la Empresa, que acaba de terminar. Fue un acto emotivo, en el que hubo una parte para los contenidos (en #CMUA siempre intentamos aportar valor para todos en lo que hacemos) en forma de mesa redonda. Y por supuesto hubo una parte para dar un merecido homenaje a los alumnos de la primera promoción de la edición en Barcelona de este máster, que ya tiene abierta la matrícula para su segunda edición.
Me gustaría compartir el discurso que tuve el placer de dar, dedicado a los alumnos desde aquí, de nuevo, con mi agradecimiento:
Buenas tardes, bona tarda, y muchas gracias por acompañarnos hoy en este acto, que quiere ser un agradecimiento y un homenaje a los alumnos y alumnas de la primera promoción en Barcelona del Máster Ejecutivo Semipresencial en Community Management y Dirección de Redes Sociales en la Empresa. Sed bienvenidos…
Me llamo Víctor Puig y he tenido la satisfacción y el privilegio de dirigir esta primera edición que hoy celebramos. Me gustaría poder compartir hoy con vosotros algunas reflexiones acerca de esta experiencia, reflexiones acerca de cambios y evoluciones.
La primera reflexión tiene que ver con la vocación. Creo que quienes de alguna manera dedicamos esfuerzo y tiempo a la docencia lo hacemos en parte por que nos gusta poder compartir lo que sabemos, y aprender de lo que saben los demás. Hubo un tiempo en que quién quería ser valioso en su organización escondía su saber, de forma que la ignorancia de los demás le generaba una falsa sensación de invulnerabilidad. Hoy, las organizaciones que sobreviven son las que se dotan de talento que comparte su información y cuyos empleados se retroalimentan de los demás. Los colectivos han evolucionado, están en ello o desaparecerán como tales. Quienes queremos ser profesores, en el fondo, queremos aprender de los alumnos, con los alumnos y de otros profesores. Gracias pues a los profesionales que en esta edición de CMUA han compartido lo mucho que saben con nosotros, y gracias a los alumnos y alumnas, pues vuestras preguntas, vuestras dudas y vuestra participación nos han enseñado también a nosotros.
La segunda reflexión tiene que ver con la actitud que he podido respirar en clase. He visto una actitud generosa, creativa, motivadora y retadora por parte de los profesionales que nos han dado clase. Insisto en que son profesionales, no sólo docentes. Son personas que se ganan la vida, que crean empresas, que asisten a clientes haciendo cada día lo que luego nos enseñan. Y eso es generoso, y es motivador.
Y he respirado exigencia, curiosidad y hambre de conocimiento por parte de los alumnos. Cada una de vuestras aportaciones, cada puesta en duda de nuestros alumnos es un reto, un empujón hacia adelante y un motivo para reafirmanos en que, sí, queremos enseñar. Por que vale la pena, por que enfrente tenemos a futuros compañeros que nos completan. Gracias a profesores y alumnos por esa actitud que nos ha hecho a todos un poco mejores hoy de lo que éramos al empezar el curso.
La tercera reflexión tiene que ver con lo que os vais a encontrar a partir de hoy, una vez ha terminado el máster, una vez tengáis un diploma más en vuestros currículums. ¿Y ahora qué?
La mesa redonda contó con la presencia de Javier Robledo (TBWA), Marc Elena (Manifiesta), Marta Abella (Tinkle) y Óscar Carrión (CMUA)
Alumnas y alumnos, mi reflexión como respuesta al “¿Y ahora qué?” se resume en pocas palabras, apenas cuatro: ahora no os conforméis.
Ahora demostrad, trabajad, luchad y perseguid aquello que buscabais al empezar el curso. Os vi al llegar y os veo hoy aquí, y sois más seguros, más conscientes de lo que sabéis, más capaces de resolver los problemas que el máster plantea en su temario. Quizás no os deis cuenta, quizás creéis que exagero. Pero he visto vuestros trabajos finales, he visto que habéis resuelto con creces lo que el primer día de clase os hacía dudar. Y seguramente, la primera vez que tengáis enfrente a un jefe, a un cliente o a un compañero y tengáis que desarrollar un plan de social media como el que habéis hecho en el curso notaréis igualmente un temblorcillo.
Ese temblor os está diciendo, os está exigiendo que no os conforméis. Ese temblorcillo es el calor y el ánimo de vuestros compañeros y compañeras de clase, que os recuerdan que no vale conformarse.
No os conforméis con lo que os digan cuatro blogs que dicen que saben, no os conforméis con lo que ordene el jefe, no os conforméis con lo que os pida el cliente. No os conforméis con la primera versión, ni con la segunda de lo que hagáis. No os conforméis, por que vosotros sois excelentes, vosotros os habéis esforzado en clase y lo habéis demostrado. Vosotros sabéis más de lo que creéis que sabéis. Y si no os conformáis, si os acordáis de que el esfuerzo que habéis hecho en cmua os ha de dar esa seguridad que buscabais, lo haréis bien. Lo haréis muy bien. Pero no os conforméis.
Mi cuarta reflexión tiene que ver con por qué sé que no os vais a conformar. No os conformaréis con un trabajo a medias por que vosotros habéis decidido crecer. Vosotras y vosotros no os vais a conformar por que lo fácil es no hacer nada. Lo fácil es dejarse llevar por las malas noticias, por un ambiente económico deplorable como el que hoy hay ahí fuera y no hacer nada. Lo fácil es quejarse de que los políticos no están a la altura y no hacer nada. Lo que hacen muchos es esperar a que aparezca una oportunidad sin salir a por ella.
Y vosotros no sois así, por que hace ahora un año no os conformasteis y decidisteis ser mejores, aprender más, formaros y avanzar. Algunos apostando por su proyecto personal, otros reciclándose en un nuevo entorno laboral, o mejorando sus capacidades en su empleo actual. Vosotros decidisteis CMUA y hoy os lo agradecemos de corazón y de corazón nos enorgullecemos de ver que valió la pena, que vuestro nivel hoy es bastante más alto que hace un año.
Hemos tenido en clase mentes creativas, hemos tenido estrategas, diseñadores, emprendedores. Hemos tenido almas que navegan en la cultura, talentos que dan el máximo en las páginas de medios de comunicación, en las webs para sus clientes. Algunos de vosotros sois vuestra propia empresa, o aprovecharéis lo aprendido para crearla. Hemos tenido un ecosistema rico, potente, retador, un puñado de personas de las que no se conforman. Uno de los activos más importantes que tenéis ahora y que no teníais hace un año es ese ecosistema: los compañeros y compañeras que habéis conocido, que saben en qué sois buenos de la misma manera en que tú sabes en qué son mejores que tú. Aprovechad esos contactos, por que hay mucho valor en ellos.
Para CMUA ha sido un privilegio que os decidierais a incorporaros a esta familia.
Y mi quinta y última reflexión tiene mucho que ver con ese concepto de familia, de grupo que se apoya y que se ayuda. Los alumnos de este año seguramente me habéis escuchado explicar esto alguna vez, permitidme que se lo cuente también a quienes no nos conocen tanto y que hoy nos acompañan. Dejadme que les cuente Cómo conocí CMUA y por qué estoy tan contento de involucrarme en este proyecto.
Conocí CMUA cuando Óscar Carrión me invitó a dar una charla a los alumnos de la tercera promoción de Alicante. Era la última charla del curso, y fui con cierto recelo. Había dado clase en varios cursos de varias entidades diferentes en Barcelona, y ya sabía que los últimos profesores lo tienen más difícil, principalmente por que todo el mundo empieza un curso con mucha ilusión, pero si el curso defrauda a los alumnos, las últimas clases tienen ese resquemor que flota en al aula como un fantasma a punto de encender los ánimos, que distrae a los alumnos o que los vuelca en los profesores que les dan confianza…
Lo que me encontré en mi primera experiencia en CMUA fue un aula con 80 alumnos que preguntaban, participaban, opinaban, reían, aplaudían. Me encontré con una clase dinámica, alegre, entusiasmada e inteligente. ¿Cómo lo han hecho? Me preguntaba. ¿Cómo puede ser que entidades con cierto prestigio y cierta experiencia en Barcelona fracasen con las expectativas y que CMUA no tenga ese problema?
Como en tantas otras cosas, la receta es sencilla: por que se trata al alumno como un cliente de un restaurante al que hay que satisfacer en cada plato que se le sirve. Y como en tantas otras cosas, las recetas sencillas son las más difíciles, las más exigentes con la calidad de cada ingrediente. No vale el número de tenedores de la puerta, no vale el nombre de la marca, no vale el título para enmarcar y para engrosar un currículum. Lo que vale aquí es el trabajo de cada día, de cada sesión, lo que empuja a CMUA hacia arriba es su gente. Y su gente son sus alumnos también, por supuesto. CMUA es un proyecto que vale la pena por que respira esa dedicación y por que los alumnos son los que nos aportan ese oxígeno, demostrando que sí vale la pena.
Digo familia no como una palabra vacía que queda bien en un discurso, sino que digo familia con todas las letras. Por que a lo largo del curso han surgido amistades, han surgido proyectos que necesitarán del talento de otros para crecer. En las ciudades que nos llevan más ventaja en ediciones, de las aulas de CMUA han salido asociaciones, empresas y colaboraciones que han generado proyectos interesantes. En los foros de CMUA, en los grupos de Facebook que compartimos, se acumula el saber hacer que seguirá a vuestra disposición: sois vosotros mismos los que compartís recursos, los que contestáis preguntas, los que mandáis sonrisas, ánimos y fuerza. Vosotros sois ya parte de la familia CMUA, y nuevamente, os lo agradezco mucho.
Os agradezco y os felicito por vuestra vocación de ser mejores, por vuestra actitud constructiva, por no conformaros con el ahora y por decidir crecer. Os agradezco que seáis parte de esta familia y os felicito por que ese esfuerzo os va a llevar lejos. Soltad amarras y navegad por estas redes sociales que os han de ver crecer y donde seréis vosotros quienes haréis crecer a los demás.
Gracias y felicidades a todos los alumnos y alumnas de la primera edición en Barcelona del máster CMUA.

Los alumnos que pudieron asistir a la graduación con el gesto del hashtag de CMUA. Desde aquí, cariñosos saludos a los que no pudieron venir…
Añadir sólo que espero seguir en contacto con vosotros, y espero también que los alumnos de las próximas ediciones quieran sumarse a este grupo tan maravilloso, a esta comunidad #CMUA donde, como decía al principio, todos aportamos valor a todos. Si estás buscando una opción de formación de calidad en marketing online y redes sociales, serás bienvenido@
(muchas gracias a Alberto Jiménez por las fotos)
By Úrsula octubre 16, 2013 - 10:28 pm
Víctor va ser molt emotiu. El millor del la tarda! Moltes felicitats!
By Aitor octubre 16, 2013 - 10:47 pm
Un gran discurso. Gracias por compartirlo!!
Ha sido un placer formar parte de esta 1a promoción!!
By Montse octubre 17, 2013 - 8:23 am
Aposté por #CMUA principalmente por dos motivos. Por los contenidos y su manera de tratarlos y por el ambiente colaborativo y de buen rollo que giraba en torno a la comunidad CMUA (en mi caso, este factor tomaba mucha importancia ya que una formación semipresencial requiere de un alto grado de motivación para no dejarla arrinconada por el día a día)
Tu discurso resume de algún modo lo que todos podemos pensar. Conseguiste transmitir parte de lo que ha supuesto para muchos de nosotros el formar parte de este proyecto.
Me llevo un baúl de buenas experiencias (personales y formativas) y el orgullo de formar parte de la 1ª promoción de CMUA Barcelona.
By noel octubre 17, 2013 - 10:13 am
Muchas gracias Victor,
Un discurso muy emocionante, sobre todo porque habla de un sentimiento compartido por los que formamos parte de esta familia que es #cmua.
Muchas felicidades a tos@s los alumn@s de esta edición, al equipo de profesores y por supuesto a tí, por esta fantástica edición del Máster #cmua en Barcelona.